La biomasa y las pastillas de combustible

La energía de la biomasa es un tipo de energía renovable procedente del aprovechamiento de la materia orgánica e inorgánica formada en algún proceso biológico o mecánico, generalmente de las sustancias que constituyen los seres vivos o sus restos y residuos.


El combustible llamado pellets de madera

Los pellets o pastillas de biomasa (también conocidos como pastillas de combustible de madera) no contribuyen al efecto invernadero y los podríamos definir como pequeños cilindros de serrín de madera comprimida y en estado natural al 100%. Están formados por madera reciclada en forma de serrín prensados sin aditivos ni colas o aglutinadores. Son residuos que convertidos en serrín y virutas de otro modo no se aprovecharían y se transforman en pellets:

• Diámetro de unos 6 mm.
• Longitud de 10-30 mm.
• Humedad máxima del 8% (menor de 10%).
• Contenido de cenizas <0,5%.
• Densidad mínima de 650 kg/m³ o sea que en un metro cúbico caben 650 kg de pellets.


Poder calorífico

Según el tipo de madera que se ha utilizado para hacer el serrín podemos clasificar su poder calorífico por calidades:

• La madera sin tratar puede dar entre 1000 y 3500 Kcal/h por kg según la dureza de la misma y su porosidad.
• Calidad baja: si su poder calorífico va de 4000 a 4500 Kcal/h por kg.
• Calidad alta: si el poder calorífico va de 4500 a 5000 Kcal/h por kg.
• Calidad DIN PLUS: los pellets din plus pueden llegar a tener un poder calorífico entre 4800 a 5200 Kcal/h por kg.


Otras ventajas

Otras ventajas de las pastillas de combustible de biomasa es que,  al igual que la madera natural, no contaminan, no huelen mal y las cenizas se pueden utilizar de abono. La emisión neta de CO2 es nula. Además, su proceso de fabricación permite tener un producto muy regular y homogéneo en su forma, dimensiones y poder calorífico, por tanto facilita su transporte. Los pellets se almacenan en silos prefabricados o de lona. Finalmente, cabe destacar que la dosificación para la regulación de las calderas y estufas puede ser muy precisa y podemos obtener los máximos rendimientos posibles.


Valor añadido

El valor añadido respecto a otros combustibles es que el pellet es un recurso local y por tanto su beneficio también es local, creando puestos de trabajo en su mismo país de origen, y su precio está bien regulado directamente por la oferta y la demanda.


Distribución del pellet

En cuanto al sistema de distribución del pellet, cada vez más fabricantes poseen ya camiones preparados con sistemas neumáticos y básculas incorporadas en el mismo camión para poder descargar directamente en el depósito de almacenamiento de una manera limpia y rápida.


Ahorro previsto

El hecho de sustituir o añadir al sistema una caldera de BIOMASA nos permite tener un ahorro respecto a los combustibles fósiles actuales como se indica a continuación:

2 kg de pellets = 1 litro de gasolina aproximadamente.
1 m³ de pellets = 320 litros de gasolina aproximadamente.
1 m³ de pellets = 650 kg de pellets.
1000 Kg de pellets = 1,56 m³ de silo.


Tenga en cuenta que por cada kW de demanda calorífica son necesarios 400 kg de pellets al año y por cada metro cuadrado de vivienda son necesarios 50 kg de pellets al año.


Si desea más información, no dude en contactar con nuestro equipo de expertos que le ayudará sin ningún compromiso.